ANTICOAGULANTES NATURALES
Autores:
Personal
de la Coordinación de Investigación y
Planificación Intercultural IAANEM 2023.
Es importante definir algunos términos para la mejor
comprensión del tema que seguidamente abordaremos.
¿Qué es un coagulo?
Es una especie de masa que se forma cuando las plaquetas, proteínas y células de la sangre se unen entre sí, pasando de liquida a sólida, para detener el sangrado de una herida.
¿Qué es la coagulación?
Es el proceso mediante el cual los factores de coagulación (proteínas de la sangre), ayudan en la formación de coágulos para frenar el sangrado en las heridas; la coagulación es un proceso necesario, sin embargo, si es excesiva, es potencialmente peligrosa y se llama trombofilia; puede deberse a trastornos hereditarios o adquiridos.
¿Qué es un
anticoagulante?
Es un diluyente de la sangre, que previene la formación de coágulos en venas y arterias que pueden causar embolias y ataques al corazón; si ya están formados impide su crecimiento y favorece su disolución. Son sustancias utilizadas para el tratamiento de la trombosis, que es la formación de un trombo en un vaso sanguíneo. Los anticoagulantes pueden ser medicamentos propiamente dichos o anticoagulantes naturales; estos últimos son los que nos ocupan en este tema.
Los anticoagulantes naturales son sustancias que reducen la capacidad de la sangre para formar coágulos, no con tanta eficiencia como los medicamentos anticoagulantes, pero si tienen una acción bien importante. Si se tiene un tratamiento con medicamentos anticoagulantes, es importante consultarle al médico la posibilidad del consumo de anticoagulantes naturales, ya que pueden interferir en su eficiencia. Los remedios naturales no sustituyen los medicamentos recetados.
Entre los más
importantes están:
Cebolla: Es considerado el anticoagulante natural por excelencia; debe consumirse cruda ya
que el calor acaba con sus propiedades.
Ajo: Sus propiedades reducen los riesgos
coronarios, es un potente antioxidante y reduce el colesterol.
Cúrcuma: Uno de sus principios activos, la
curcumina, actúa como anticoagulante. No se recomienda usarlo con otros anticoagulantes.
Vit. E: Es un anticoagulante muy
eficaz, está presente en los huevos, el trigo, frutos secos, hortalizas de
hojas verdes, aguacate y otros.
Agua: Contribuye a evitar que la
sangre se espese; debemos tomar un mínimo de 8 vasos diarios.
Omega 3: Impide que las plaquetas se agrupen
y formen coágulos. El salmón, el atún y la trucha son los alimentos más ricos
en este tipo de ácido graso.
Granada: Aumenta el flujo sanguíneo y
frena la función plaquetarias impidiendo que se junten.
Piña: Contiene bromelina, que es una enzima que acelera el
flujo sanguíneo y reduce la formación de coágulos
Jengibre: Contiene salicilato, un químico con
propiedades anticoagulantes. La mejor forma de consumirlo es hervir la raíz,
añadirlo a cualquier comida o tomarlo como infusión.
Aguacates, cerezas, arándanos, cacahuetes y almendras, son otros alimentos que contienen
salicilato.
Vino tinto: Una copa al día ayuda a evitar la coagulación prematura.
Debemos estar atentos a la presencia
de algunos síntomas que pudieran hacer pensar en la presencia de coágulos
sanguíneos, entre ellos:
· Dolor repentino en el pecho, en una pierna o en un brazo.
· Hinchazón en la pierna o en el brazo.
· Ritmo cardíaco acelerado.
· Dificultad para respirar.
· Sensación abrumadora de temor.
· Sudoración o fiebre.
· Tos con sangre.
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